Suele pensarse que por la espectacularidad de los trabajos verticales en Las Palmas de Gran Canaria, debido a la altura y a ver empleados colgados con cuerdas haciendo trabajos de limpieza, de rehabilitación, de instalación, etc., estos son trabajos de riesgo. Sin embargo, queremos desmentir este extremo y explicar por qué los trabajos verticales son mucho más seguros de lo que pueden parecer en un principio.

En primer lugar, hay que destacar que los empleados de Condor Trabajos Verticales están perfectamente formados para dichos trabajos y pasan revisiones físicas de forma más periódica que un trabajador convencional que se suba a un andamio. Por no hablar de los equipos, revisados con anterioridad a ser usados en cada ocasión, tal y como establece la normativa vigente. Al final, si uno piensa en un andamio, muchos trabajadores están a gran altura y sin mucha mayor protección que un casco, algo que no ocurre con los trabajos en altura.

Los equipos empleados para los trabajos verticales en Las Palmas de Gran Canaria tienen diferentes dispositivos y elementos que tienen como objetivo permitir acceder de forma segura al lugar de trabajo, así como para posicionarse y abandonarlo.

Estamos hablando, por ejemplo, de descendedores autoblocantes, bloqueadores de ascenso, varios conectores con seguro, una cuerda semiestática de suspensión de longitud variable, un arnés de suspensión y un cabo de anclaje doble, entre otros elementos. Y en cuanto a las cuerdas, tienen un coeficiente de seguridad máximo de diez puntos, en cumplimiento de la normativa UNE-EN-1891 que regula este tipo de trabajos.